Atentado a Aznar

Mon, Aug 13, 2007 4-minute read

Buscando entre mis recuerdos para ver si recordaba si tenía un saco de dormir encontré esta maravilla de “obra de teatro”. Se llama Atentado a Aznar. Fue un trabajo para clase de Literatura Castellana y lo hicieron 3 amigos en 4º de ESO: Maspons, Muntanya y el yo de hace unos 9 años.

Aquí la transcribo, no sin antes saludar a mis geniales compañeros, con los cuales el otro día fui a hacer unos frontones de puta madre. Old school power. Y tampoco sin antes decir que es una obra de ficción creada por 3 adolescentes bebedores de Tarantino.

Atentado a Aznar

Está Negro en una habitación y entra Verde.

Negro: Hola
Verde: Hola, ya lo tengo, llega a las cinco.
N: Bien hecho. Espero que sea bueno. Mientras esperamos, échale un vistazo a los planos. Voy a buscar las armas.
V: De acuerdo, jefe.

Verde se queda mirando los mapas, y en unos segundos vuelve Negro con unas armas en mano. Al verlas, Verde dice:

V: Oh! Es una Magnum del calibre 32, con balas de 9mm. ¡Menuda Belleza! Es del 1972!!!. Esto es una relíquia.

Rojo irrumpe en la habitación, y, sobresaltados, Verde y Negro le apuntan.

Rojo: Joder colegas, que soy yo.
V: Hostia puta. Me cagüen tu padre.
N: Podrías llamar, ¿no?
V: Venga, va, entra y para de dar por el culo.
N: Te dije que quería seriedad y profesionalidad.
V: Tranquilo, es muy bueno, pero es que hoy es lunes.
N: ¿Y qué?
V: Que los lunes llega la mercancía de Colombia.
R: Hey tíos, ¿sabéis lo que me pasó?
v: No, y no nos interesa.
R: Pues, ayer, me fui a un bareto que, fua, fue increíble.
V: Hey Rojo, que tenemos asuntos importantes a tratar.
R: Entonces entró en el bar una especie de, como de persona vendiendo unos papeles… Bueno, esto o algo, y-
V: ¡¡¡Que te calles!!!
R: Joder, tampoco hace falta que te pongas así. Bueno, lo que os iba diciendo. Que estaba el tío vendiendo cupones, y va, y un colega le dice al ciego: Oye, ¡que no ve3s que me estás pisando?
jajajajajaja!!! ¿¿Pilláis?? ¿Pilláis o no? ¡¡¡Ciego!!! ¡¡¡Era ciego!!!! jajajajaj!!
V: Venga Rojo, déjalo, hemos de planear el atentado.
R: Pero era bueno, eh.
N: Escuchad: Verde se situará en el tercer piso del edificio que hace esquina en la calle Balmes; tendrá con él una Magnum del 47 y una arma de largo alcance con un visor láser sólo detectable con unas gafas especiales que llevará puestas. Rojo estará abajo del piso, esperando a Verde con un Mercedes negro con matrícula falsa.
Yo estaré situado en el Hotel que está en frente del edificio.
Todos estaremos conectados con micrófonos y auriculares. A la hora 15:17 en punto, Verde disparará.
V: De acuerdo.

Rojo se da un susto, como si se levantase de un profundo sueño y dice:

R: ¿Qué? ¿Qué decíais?
V: Que tú sólo tienes que estar debajo del edificio, donde estaré yo.
N: ¿Alguna pregunta?
V: Sí, ¿a qué hora se hará la operación?
N: Pues sobre las quince horas. Ya he dicho que el disparo se tiene que efectuar a las 15:17 en punto.
V: Muy bien, ya no tengo más preguntas.
R: Sí, err… ¿quién va a ir al congreso?
N: ¡Cómo que quién-
V: ¡¡¡Pues Aznar, estúpido!!!
R: Ahhh. … Y lo vamos a matar.
V: Pues claro.

R: ¡Por qué?
V: Porque, porque… ¿Qué coño sé yo?
N: Pues porque él es el presidente del PP.
R: Ahh, sí claro.

R: ¿Y qué hace de malo?
V: Pues… bah! No te ralles más!!
N: Eso, que lo hacemos y punto. De acuerdo, mañana a la hora que habíamos quedado, ¡y no se discute!
R: Vale, tranqui. Ei Verde, estamos libres hasta mañana. Vayámonos de cachondeo, ¿vale?
V: ¡Perfecto!

Bernat Maspons
Adrià Muntanya
y yo.

Nota: Me ha hecho gracia ver cómo muchas de las faltas que tenía este texto no las reconoció el profesor en su momento pero sí el corrector de Firefox ahora que lo he transcrito.