Monstrous Regiment

Sat, Dec 30, 2006 2-minute read


Maldito Terry Pratchett. ¿Cómo puede hacer libros como churros y que todos sean tan buenos? En fin. Otro mundodisco en mi cabeza, con todas las reflexiones, estupideces y surrealismo que esto conlleva.

La cosa sucede en Borogravia, un país adorador del dios Nuggan, un dios que ha perdido el hilo de la evolución y considera totalmente abominable casi cualquier cosa (hombres vestidos de mujeres, las orejas, el chocolate, el color azul, …).

Para poder satisfacer a su dios, los borogravianos se han hundido en una profunda miseria y la única manera que tienen de combatirla es declarar la guerra a todos los países colindantes con el suyo.

Hasta el punto en que ya no saben bien bien porqué están luchando.

La prota es una chica que se enlista al ejército para poder encontrar a su hermano perdido en la guerra. Se tiene que disfrazar, puesto que es una abominación para Nuggan el hecho de que una mujer luche en el ejército.

Así van sucediendo toda una serie de aventuras totalmente hilarantes atravesando el país para atacar al enemigo por sorpresa (atacar a un castillo con muros gigantescos y con infinidad de defensas y trampas por doquier por un grupo de 6 soldados novatos es, realmente, una sorpresa para cualquiera).

Muy buena la escena del campo de batalla. Donde hay más famílias que soldados, y más casas de putas que famílias.

Y es que, al final, ¿qué sentido tiene la guerra? ¿Y por qué vivimos en un mundo donde las mujeres no son aceptadas en los trabajos “para hombres”? ¿Y qué sentido tiene adorar a un dios que no hace más que causarnos miedo para mantenernos dormidos y sumisos?

Gran Pratchett, otra vez contra la religión, el machismo y las guerras.
Uno de los mejores.